La inteligencia artificial (IA) es una de las tecnologías más disruptivas y prometedoras del siglo XXI. Su capacidad para procesar grandes cantidades de datos, aprender de ellos y generar respuestas coherentes y creativas ha abierto un sinfín de posibilidades en diversos campos y sectores.
Uno de los ejemplos más recientes y sorprendentes de la IA es el chat GPT, un chatbot que utiliza el modelo GPT-4 para simular una conversación humana sobre cualquier tema. Chat GPT se ha hecho famoso por su habilidad para responder casi cualquier pregunta haciendo uso de los contenidos de la red, así como por su versatilidad para generar textos originales sobre diferentes formatos y estilos.
Chat GPT ha causado una gran conmoción en el ámbito educativo, donde se le ha visto como una herramienta potencial para mejorar el aprendizaje, la motivación y la evaluación de los estudiantes. Sin embargo, también ha generado controversia y preocupación por sus posibles efectos negativos, como el plagio, la desinformación o la pérdida de pensamiento crítico.
Ante este escenario, es necesario reflexionar sobre el papel que debe tener la IA en la educación y cómo regular su uso ético y responsable. Chat GPT no es más que un ejemplo de lo que la IA puede hacer y lo que está por venir. Como afirma el propio sistema, “la revolución tecnológica está en marcha y se espera que transforme radicalmente todos los aspectos de nuestra sociedad”.
La inteligencia artificial (IA) puede complementar a los trabajadores de varias formas, según los resultados de búsqueda. Algunas de ellas son:
- Automatizando tareas repetitivas y monótonas con la IA, lo que reduce el error humano y mejora la eficiencia. Además, al automatizar estas tareas, los humanos pueden centrarse en tareas que requieren habilidades únicas.
- Apoyando a los orientadores laborales con la IA, que puede perfilar y recomendar mejores rutas de empleabilidad a los buscadores de empleo. Esta tecnología también permite optimizar los emparejamientos entre buscadores de empleo y vacantes disponibles.
- Ayudando a los diseñadores de entornos laborales con la IA, que puede calcular los rendimientos del trabajo y facilitar la introducción de herramientas y aplicaciones de IA para mejorar el diseño y la gestión del trabajo.
- Formando a los empleados en estadística con la IA, lo que les ayudará a entender cómo interpretar los datos y cómo darles sentido. Esto equipará a la empresa para tomar decisiones basadas en datos.
Según los resultados de búsqueda, hay varios puestos de trabajo que podrían estar amenazados por la inteligencia artificial (IA) en el futuro. Algunos de ellos son:
- Ejecutivos de telemarketing. La IA puede realizar llamadas automáticas y personalizadas a los clientes potenciales, lo que reduce la necesidad de personal humano.
- Digitadores contables. La IA puede procesar y analizar datos financieros con mayor rapidez y precisión que los humanos, lo que facilita la automatización de las tareas contables.
- Recepcionistas. La IA puede atender y derivar llamadas, gestionar agendas y reservas, y proporcionar información básica a los visitantes, lo que disminuye la demanda de recepcionistas humanos.
- Encargados de empaque y distribución: La IA puede controlar robots y drones que pueden realizar estas tareas con mayor eficiencia y seguridad que los humanos, lo que reduce los costes y los riesgos laborales.
- Correctores de prueba. La IA puede detectar y corregir errores ortográficos, gramaticales y de estilo en los textos escritos, lo que disminuye la necesidad de correctores humanos.
- Ejecutivos de ventas. La IA puede recopilar y analizar datos sobre el comportamiento y las preferencias de los clientes, lo que permite ofrecer productos y servicios más personalizados y adecuados a sus necesidades, lo que aumenta las tasas de conversión y fidelización.
- Investigadores de mercado. La IA puede recoger y procesar grandes cantidades de datos sobre el mercado, la competencia y las tendencias, lo que permite obtener insights más profundos y precisos para tomar decisiones estratégicas.
Esto no significa que estos trabajos vayan a desaparecer por completo o que no se puedan adaptar a la nueva realidad. La IA también ofrece oportunidades para crear nuevos puestos de trabajo o mejorar las habilidades humanas.
La disrupción de la inteligencia artificial: Chat GPT es una tecnología que puede tener efectos positivos o negativos, según cómo se utilice y se regule. Según los resultados de búsqueda, algunas de las razones por las que debemos ver la IA como una oportunidad más que como una amenaza son:
- La IA puede impulsar el crecimiento económico mundial, aumentando la productividad y el consumo, y creando nuevos sectores y empleos.
- La IA puede mejorar la calidad de vida de las personas, ofreciendo soluciones innovadoras para problemas sociales, ambientales y sanitarios.
- La IA puede potenciar la creatividad y el aprendizaje humano, facilitando el acceso a la información y a la educación, y generando nuevas formas de expresión artística y cultural.
- La IA puede fortalecer la seguridad y la democracia, ayudando a prevenir y combatir el crimen, el terrorismo y la corrupción, y fomentando la participación ciudadana y los derechos humanos.
- La IA puede ser un aliado para la cooperación internacional, favoreciendo el diálogo y el entendimiento entre países y culturas diferentes, y contribuyendo a los objetivos de desarrollo sostenible.
Sin embargo, también hay que tener en cuenta los posibles riesgos o desafíos que plantea la disrupción de la inteligencia artificial: Chat GPT. Algunos de ellos son:
- La pérdida o precarización de empleos humanos por la automatización o sustitución de tareas por máquinas inteligentes.
- La brecha digital o desigualdad entre quienes tienen acceso a los beneficios de la IA y quienes no.
- Los problemas éticos o morales relacionados con el uso responsable o abusivo de los datos personales o sensibles por parte de agentes públicos o privados.
- Los conflictos legales o jurídicos derivados de la atribución de responsabilidad o culpabilidad en caso de daños causados por sistemas o agentes inteligentes.
- Los riesgos existenciales o catastróficos asociados a una posible superación o rebelión de las máquinas inteligentes contra los humanos.
Por eso es importante que haya un marco regulatorio adecuado que garantice un desarrollo ético e inclusivo de la IA. También es necesario que haya una mayor concienciación e implicación social sobre esta tecnología.
En Leindu siempre abrazamos el progreso y desde el inicio estamos valorando cómo podría ayudar la disrupción de la inteligencia artificial: Chat GPT. Para mejorar la búsqueda de profesionales y para que cada profesional consiga desarrollar de una forma más eficiente sus tareas.
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